15 ago 2007

El spot de la semana: ¿Un mal día?

Aprovechando que ando por el foro -ya os conté mis aventuras lisboetas hace un par de días, nada más regresar-, he decidido obsequiaros con un nuevo spot, este fresco y optimista, como deben ser las vacaciones. Se trata de un anuncio de pañales Huggies. Sí, habéis leído bien: pañales. Es la historia de un mal día, creada por McCann Erickson para la marca Huggies de Unilever. Es un buen anuncio. Que lo disfrutéis...

13 ago 2007

Crónica de unos días lisboetas de verano

"Desde la terraza del café miro trémulamente hacia la vida. Poco veo de ella -el bullicio- en esta concentración suya en esta plazuela nítida y mía. Un marasmo como un comienzo de borrachera me elucida el alma de cosas. Transcurre fuera de mí en los pasos de los que pasan. (...) La vida evidente y unánime"
Fernando Pessoa , El libro del desasosiego

He vuelto esta mañana de Lisboa, que sigue siendo una ciudad mágica y hermosa, llena de rincones fascinantes, de música y de vida. Allí he pasado los últimos cinco días, descubriendo nuevos lugares y fotografiando todo aquello que se me ponía por delante y me sugería algo especial. La ciudad de los fados y los tranvías hervía bajo el sol de agosto, animada pero lánguida y decadente, como me parece siempre ese lugar.

Una de las mejores anécdotas del viaje ha sido la experiencia del fado amateur en la Tasca do Chico, ese clásico del barrio alto en el que algunos aficionados al cantar popular portugués -que se cuentan por millones en todo el país, y lo defienden como si les fuera la vida en ello-, deleitan a turistas y locales en un pequeño y abarrotado local, en el que la comida y la bebida son de puro relleno. Las famosas fibanas -el clásico montadito en versión cutre- son cuartelarias, y la sangría parece hecha con Redoxón, pero cuando las luces se apagan, ni las moscas se atreven a volar: el público chista sin cesar hasta volverse impertinente a cualquiera que ose respirar cuando las guitarras suenan y los fadistas se arrancan. Como véis, no hay fotos del evento. Topamos incluso con el ego de una diva aficionada con ínfulas de Rodrigues, y con la bizarra -gracias por sugerir el término, Laura-, actuación de un fadista mezcla de Arnold Schwarzeneger y Clark Gable, un hombre todo músculo y sentimiento. Esto, como todo lo que no se puede pagar con Mastercard, no tiene precio.

Para sangria y fado buenos los del Chapitô, el ya famoso local de una organización cuyo objetivo dice ser la acción social, mediante la formación y la difusión de la cultura. Quizá os hable de él otro día, pero yo fui a conocerlo una noche, pues había sido recomendado especialmente por amigos como sitio chulo para ir a tomar una copa con vistas privilegiadas y precioso entorno. El local, para echarse una copichuela en su terraza, cenar o bajar al sótano a escuchar música en directo, es realmente precioso. Tiene un ambiente lo que se dice agradable -con un puntito entre hippie y pijo-, y su sangría con hierbabuena y canela es realmente deliciosa. Tanto, que estuvimos escuchando a una dotada joven que cantaba fados durante unas tres horas, y luego no tuvimos ganas de cortarnos las venas. Y como no corrió la sangre, nos mudamos -ya a eso de las dos de la madrugada de un viernes lisboeta- a una coqueta tetería que queda poco más abajo del tourmalet que es esa cuestecita de la Costa do Castelo. Allí, haciendo honor al espíritu del local, nos fumamos una cachimba de melón y sorbimos despacito un té Yoga, con cardamomo y jengibre. Una gran noche en Lisboa.

Otro de los hitos -que resultó del todo exitoso, ya veréis por qué- de mi estancia fue el desayuno en el Martinho da Arcada, el mítico café del que dicen que Pessoa -lo siento, Guada, ya sé que no te gusta-, fue asiduo. No he podido olvidar su tarta de chocolate, y por tres veces fui hasta la Plaza del Comercio a buscarla infructuosamente. Cansada de acudir sin fruto en pos de mi porción de dulce, decidí pasar uno de esos viernes tranquilos y magníficos recorriendo despacio una ciudad sin prisa. Pero antes había que prepararse: me compré un ejemplar de El País y me senté en la terraza del Martinho a desayunar en condiciones. Una soberbia raja de melón dulce, un zumo de naranja, un cafelito y un bollo me dejaron como nueva. Y aproveché el tirón para ver una bonita exposición de dos fotógrafos de National Geographic sobre la belleza mar y su expolio. Y luego al Jardín Botánico, un edén en medio de Lisboa, en que pueden admirarse desde deliciosas flores a impresionantes árboles de todo tipo, pasando por un criadero de mariposas Monarca.

Me gustan las casas, las calles y las pintadas de Lisboa. Es una ciudad llena de extrañas figuras que la asaltan a una desde cualquier esquina. Presos surfistas, calaveras vaqueras, muñecas tristes o demandas populares, en un blanco y negro y technicolor que convierten a la ciudad en una galería de arte gigante. Y tienen tiendas en las que uno puede comprar el póster de su película favorita, encontrar extraños juguetes desfasados, ojear retrógados tratados sobre belleza femenina, catar todo tipo de Vinhos do Porto, o probarse camisetas ultramodernas. Al caer la tarde de mi último día en Lisboa me fui a recorrer la Rua Dom Pedro V, hasta encontrar el Pavilhao Chinês, un curioso bar en que no cabe ni un solo alfiler más en las paredes. Hay soldaditos de plomo, bustos femeninos, platos de cerámica, maquetas de tren, anteojos, plumas, vasos, abanicos...es como un rastro gigante emparedado, a la luz de las ténues lamparitas, en el que parece que los relojes no sólo se detienen, sino que vuelven atrás en el tiempo. Es un lugar singular, único. Y se puede jugar al billar, qué más queréis.

Como epílogo, lamento decirlo, pero los lisboetas no han sido en mi experiencia gente especialmente acogedora o simpática de entrada. "Hay que ganárselos", dice una amiga que los conoce bien. En su descargo he de alegar que agosto es mal momento para estar en casi cualquier sitio, excepto en casa de uno, pero los proletarios debemos viajar cuando el patrón lo autoriza. Aún así, resulta sumamente agotador que intenten meterle a uno el clavo allá donde pisa, desde el hotel hasta el restaurante, pasando por el taxi o la tienda de souvenirs. Y eso que los lisboetas tienen una retranca especial, mezclada incluso a veces con un puntito salvaje importado de Brasil, como cuando le ofrecen a una sexo por la calle. Pero cualquiera les tose. Si ya lo dicen en las pintadas: "Turista, respete el silencio portugués o váyase a España". Que se lo hagan ver, que diría mi amiga Rosa...

Si alguien quisiera ver más fotos de este viaje están en mi fotoblog.

7 ago 2007

Felices vacaciones

Queridos todos:
Hoy es mi último día de trabajo, así que, a partir de las tres de la tarde, seré libre como un pajarillo hasta el mes de septiembre. Me dispongo a disfrutar de unos días de -más o menos merecido, pero necesario- descanso en varios lugares de los que no os doy detalles porque os importarán un bledo, y para que no me encuentren los colegas paparazzi. Ya os contaré a la vuelta. Mientras tanto, no olvidéis supervitaminaros y mineralizaros. Pasadlo bien.
Foto: Tomás Llamas

5 ago 2007

Géneros: anuncios de preservativos

En publicidad, como en muchas otras cosas, hay géneros. No sé que entenderán los publicistas o publicitarios profesionales por géneros, pero no hablo de libros de texto, dado que no soy profesional del asunto, ni me considero experta en ningún modo. Hablo de lo que los profanos entendemos por género de un spot: anuncios de coches, anuncios de "colonia", anuncios de telefonía, anuncios de comida, de electrodomésticos, de detergente, de ropa... Es este el género al que me refiero. Y así, con esta base, me gustaría comentar de cuando en cuando en qué consisten algunos de esos género, sus tópicos, sus errores, sus logros. Y quizá mencione también algunos de esos anuncios de cada género que más me gustan o irritan.

Hoy querría empezar con los anuncios de preservativos. En los últimos tiempos los anuncios de condones se han modernizado a marchas forzadas. Ahora son atrevidos, sexys y muy modernos. Ya nada queda de aquella imagen del chiste del que iba a comprar condones a hurtadillas en una farmacia atestada, y el farmacéutico gritaba a pleno pulmón a la rebotica: "Merche, una caja de condones de 12 para el chaval". Si acaso, esa imagen sería ahora objeto de mofa si a alguien se le ocurriera recurrir al pasado para anunciar gomitas hoy en día.

Algunos spots de preservativos centran su fuerza en la sensualidad del tema, ofreciéndonos anuncios como el de la campaña de Control en la que dos enamorados encienden a voluntad todas las luces de la ciudad sólo con la fuerza de su pasión, o la de la pareja -también de una campaña de Control Spiral-, que oye los pensamientos del otro en plena evervescencia sexual. Otros anuncios serían los que aluden al sexo seguro, que normalmente está presente en las campañas institucionales sobre salud sexual, drogas, etc, aunque también en spots comerciales. Creo que todos recordaréis aquel sonado y controvertido lema "Póntelo, pónselo".

La última subcategoría o grupo dentro de las películas sobre preservativos serían los que recurren al humor para "quitar hierro" al asunto, o simplemente porque el sexo es divertido. De un humor un tanto siniestro, pero genial, era aquel anuncio francés para Zazoo Condoms en el que un padre desesperado sufre uno de los berrinches de su malcriado hijo en el super. Y desea haber usado un condón el día que lo concibió. Tiene muy mala leche, pero es realmente bueno. Dentro este subgénero humorístico he de recomendaros también las campañas realizadas para la marca argentina Tulipán por Young&Rubicam. Lo de Tulipán en España tiene doble guasa porque era el nombre de una margarina para los bocatas que anunció el popular Guillermo Fresser, bajando de un helicóptero para entrevistar a las mamás que preparan los sandwiches en la piscina mientras sus niños se daban chapuzones.

Pues bien, esta marca de preservativos, de cuyas campañas ya os mostré un ejemplo -aquel anuncio de la variedad Skin skin "sabor a frutilla" (cuyo enlace tenéis colgado en la zona del spot de la semana) tiene tantos y tan buenos anuncios que lo mejor es que acudáis a la propia web de Tulipán -que merece la pena visitar y que tiene varios premios por su diseño-, donde encontraréis los anuncios y otros cosas curiosas.

ADN Streem: televisión mutante

El segundo descubrimiento del que os hablaba en mi anterior post es ADN Streem, una web que ofrece televisión gratis a la carta, lo que ellos definen como "Televisión Mutante".

Tiene una serie de canales con videos de Cortometrajes, Anuncios Japoneses, Animación, Música, Conciertos, Trailers, Deportes, Videojuegos...hay contenidos para todo el mundo. Entre sus categorías, publicidad, animales, arte, ciencia...Basta entrar, pulsar cualquier categoría, y la web comenzará a mostrarnos contenidos de ese tipo, que podremos puntuar. Si nos damos de alta y creamos un perfil, el robot de búsqueda elegirá vídeos que pueden ser de nuestro agrado según las votaciones anteriores y nuestros criterios. Echadle un vistazo. Si no tenéis ningún libro que leer, ningún disco nuevo, no hay una buena peli en la tele u os apetece, os entretendréis un rato.

4 ago 2007

El vídeo de la semana: "Buenos consejos"

Navegando por la red he descubierto dos sitios que me han sorprendido e incluso impactado. Os hablaré primero del que me ha impactado, un sitio web llamado Don´t die for a diet (No mueras por una dieta, literalmente). Se trata de una pagína creada para luchar contra la anorexia, una de las increíbles paradojas de nuestro mundo moderno, en el que más de la mitad se muere de hambre y miseria, mientras el resto -nadando en la abundancia-, rechaza la comida y se autoflagela para lucir cuerpos esbeltos. En los casos más extremos, cachorros de esa mitad del mundo que elige hacer dieta mueren de inaninción autoimpuesta. Son los anoréxicos: niños y adolescentes (también algunos adultos) del mundo "civilizado" que, mentalmente enfermos a causa de la publicidad, los modelos de belleza imperantes y dios sabe qué más, dejan de comer porque creen estar demasiado gordos y no ser demasiado buenos. Aún cuando su vida se apaga sin que quede nada sano en sus débiles y demacrados cuerpos, ellos creen ser feos y enormes, y no merecer cariño ni respeto. El vídeo que os traigo esta semana está realizado por este grupo de asociaciones que luchan contra la anorexia en Dont´s die for a diet. Es un vídeo lleno de consejos. Pero no son buenos consejos. Aún así, no os lo perdáis. Ya sabéis, a la derecha, bajo el archivo de post...